viernes
De cien maneras...
Ha sido llamado por una melodía inaudible para nadie que no sea él mismo,
para ese corazón abocado a la desidia y al colapso del tedio.
Una vibración sonora que mágicamente porta su nombre en el aire,
danzando, bailando al delicado susurro de su esencia...
Cuando esto pasa, uno se lleva la mano al pecho, asustado. ¿qué sucede?
¿mi corazón se ha vuelto completamente loco?
No hay nadie delante mía y se agita convulsivamente, enrrabietado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Susurros del Viento..